miércoles, 30 de mayo de 2012

Pan de sésamo


Resulta delicioso con un poco de aceite de oliva y una loncha de jamón  dulce, y también, untado con mantequilla y un poco de salmón ahumado. Os lo recomiendo para hacer unos bocaditos variados, para acompañar unos pates o simplemente para comerlo solo y disfrutar de su suave textura y su delicioso sabor a semillas tostadas.

Para la receta he utilizado: 400 g de harina de fuerza, 15 g de levadura prensada, 1 cucharada sopera de azúcar, 2 cucharadas soperas de aceite de girasol (no deja sabor), 2 cucharadas soperas colmadas de semillas de sésamo, 40 g de masa madre, ½ cucharada sopera rasa de sal,  1 huevo batido, 2 cucharadas soperas de leche y 250 c/c de agua templada.
 
Con las manos en la masa:
En un bol de amasar pondremos la harina en forma de volcán y en el interior, con la mitad del agua, desleiremos la levadura y la masa madre. Añadiremos el azúcar, el aceite, la leche y el huevo y empezaremos a mezclar los ingredientes.  A los 2 minutos añadiremos la sal y las semillas de sésamo y seguiremos mezclando hasta formar una pasta homogénea.
Amasaremos durante 10 minutos y formaremos una bola que dejaremos descansar tapada durante ½ hora. Pasado el tiempo dividiremos la bola en 4 partes, bolearemos las cuatro y volveremos a dejar tapadas unos 10 minutos.
 
Prepararemos unos moldes planos aceitados y, con la ayuda de un rodillo de amasar o con las manos, aplanaremos las bolas y les daremos forma redonda (tipo el pan de pita marroquí) y de 1 cm de grosor.
Con ayuda de unas tijeras haremos unos dibujos en la superficie de los panes y, de adorno, esparciremos unas semillas de sésamo y un poco de azúcar. Dejaremos levar otros 20-30 minutos.
Pasado el tiempo, pintaremos los panes con huevo batido y meteremos en el horno precalentado a 200º. Hornearemos, dependiendo de si nos gusta más dorado o menos, durante unos 20 min. Sacaremos los panes del horno y dejaremos enfriar sobre una rejilla.




martes, 29 de mayo de 2012

Bocaditos de bacalao a la miel con escalibada de pimientos y tomates

La receta que presentamos hoy tiene un poco de elaboración, pero, puede hacerse preparando la guarnición el día anterior, ya que resultará mucho más sabrosa, o bien, sustituyéndola por otra menos costosa como unos pimientos verdes italianos pochaditos con un poco de aceite de oliva, o bien, “pimientitos de padrón, que unos pican y otros non”.
En lo que concierne al bacalao, su preparación hay que hacerla en dos pasos: el primero es darle una media cocción al bacalao para que se separen las lascas y, una vez atemperado, freírlo con la camiseta de miel.

 
Ingredientes para 2 comensales:
  • 2 trozos de lomo de bacalao en salazón (desalado)
  • 1-2 hojas de laurel
  • 4 cucharadas de harina
  • 4 cucharadas de miel
  • 3 pimientos rojos
  • 2 tomates maduros
  • 1diente de ajo
  • Agua
  • Aceite de oliva virgen
  • Sal
Pero vayamos por partes. Lo primero es encender el horno y calentarlo de moderado a fuerte, a 220º. Untar los pimientos y tomates con una fina capa de aceite e introducirlos en él, darles un par de vueltas y, cuando estén tiernos, sacar y dejarlos atemperar tapados con un paño o aluminio para pelarlos mejor.
Una vez se puedan manipular, pelaremos y haremos los pimientos a tiras, los tomates picados como para hacer salsa de tomate. Reservaremos.
Mientras, en sartén con 2 cucharadas de aceite de oliva virgen, doraremos un diente de ajo. Incluiremos los pimientos y el tomate y dejaremos rehogar durante 15 minutos, rectificaremos de sal y reservaremos.

Por otra parte, pondremos una cacerola hasta la mitad  de agua, introduciremos la hoja de laurel y el lomo del bacalao. Dejaremos a fuego suave hasta que el agua se torna blanca y se abre el bacalao en lascas. Retiraremos el pescado del agua y dejaremos enfriar.
En bol aparte pondremos 4 cucharadas de harina, un poco del agua de cocer el bacalao (fría) y 4 cucharadas de miel. Mezclaremos bien hasta que resulte homogénea y espesa pero un poco fluida.
Iremos rebozando las lascas o bocaditos en esta pasta y freiremos en sartén con abundante aceite. Retiraremos con espumadera y los pondremos a escurrir sobre papel absorbente para quitarles el exceso de aceite cuando adquieran  un color dorado.


La presentación corre de vuestra cuenta, seguro que tenéis mil ideas para que os quede un plato bonito y muy rico.
Os doy una opción: con la pasta sobrante hacéis un círculo en la sartén y, una vez crujiente y dorado, lo reserváis sobre papel absorbente. En el plato, se sirve en el interior del circulo de pasta la guarnición y, en un lateral, los bocaditos con una ramita de perejil. Se pueden espolvorear unas pocas  semillas de sésamo sobre los bocaditos.